Aunque muchas veces pasan desapercibidas son uno de los aspectos mas relevantes a la hora de diseñar un interior e incluso un edificio ya sean estos de carácter publico o privado.
Cuando tocamos una piedra, un tronco o una ventana, experimentamos sensaciones diferentes al tacto y esto se debe a que las partículas que constituyen los objetos se distribuyen de distinta manera, unas más separadas y otras más juntas; por ello hablamos de texturas suaves, rasposas, duras, lisas, entre otras.
Todos los materiales tienen textura. A lo largo de nuestra vida tocamos muchos materiales cuyas sensaciones quedan guardadas en nuestro cerebro y hacen que podamos recordar su textura sin necesidad de tocarlos realmente. Por ello se puede hablar de texturas físicas y de texturas visuales.
Según el diccionario textura es la propiedad que tienen las superficies externas de los objetos, así como las sensaciones que causan, que son captadas por el sentido del tacto. La textura es a veces descrita como la capacidad de sentir sensaciones no táctiles (o sea que no se captan por las manos).
De esta ultima definición es de la que nos vamos a ocupar en la entrada de hoy; como decíamos antes, todos sabemos que cada superficie nos produce una sensación táctil, pero cuando la vemos a distancia no nos hace falta tocarla para que nos transmita una sensación e integradas en un conjunto consiguen resaltar o encubrir ciertas cualidades psíquicas.
La textura es importante porque junto con la luz y otros aspectos psíquicos determinan la atmosfera de un espacio.
La calidad táctil de una superficie impacta en forma profunda tanto visual como físicamente al entrar a un espacio, que ésta sea áspera o suave, brillante o mate, cálida o fría, abigarrada o delicada, se percibe con los ojos y con el tacto.
Cuando decimos que un ambiente es rustico o pulido nos estamos refiriendo a la textura que nos trasmiten los elementos que lo componen.
Las superficies brillantes reflejan la luz; las mates la absorben; esta cualidad de las texturas influyen sobre el color; las superficies suaves hacen que el color parezca mas claro; las ásperas los oscurecen. Las texturas bastas contrastan con las suaves; en el diseño habrán de ser combinadas unas y otras de manera que armonicen bien con los elementos contiguos y sean adecuadas al uso; no obstante habrían de conservar sus diferencias de cualidad, pero sin que el contraste pueda crear una impresión ingrata.
Veamos que sensaciones transmiten las diferentes texturas y las posibles combinaciones armoniosas que pueden lograrse.
Las superficies lisas transmiten una sensación de orden y limpieza muy apropiadas para un lugar de trabajo, una cocina o un baño. Una mesa de vidrio por ejemplo, o una superficie lustrosa puede contrastar agradablemente con la calidez de una alfombra o una tapicería.Las mismas telas ofrecen la posibilidad de contrastar texturas entre ellas.
Las sombras tienden a acentuar la textura, de modo que un revestimiento de pared muy texturizado, se ve mejor cerca de una ventana que en la pared opuesta a ella.
Una mezcla de superficies todas con la misma textura produce un efecto plano. El contraste entre lo suave y lo áspero, lo brillante y lo mate, lo cálido y lo frío, crea interés y “levanta” un ambiente, aunque en ocasiones conviene evitar los contrastes demasiado chocantes.
Los muebles laqueados y todas las superficies brillantes deben ser complementados con la calidez de objetos mate.
Con todo esto esbozamos la importancia que junto con el color tienen las texturas en el diseño de cualquier interior y como contribuyen a configurar el ambiente deseado.
Las imagenes que ilustran esta entrada corresponden a la Kid Brand Carina diseñada por el estudio SANAA, que lo mismo realizan una pequeña tienda como ésta que el Centro de aprendizaje Rolex del que os ofreciamos imagenes en una entrada anterior , En ellas podemos apreciar la importancia de la textura de los elementos en la configuración del espacio y la transmision de sensaciones.
Corregidme si me equivoco, pero la principal innivacion de los ultimos anhos en arquitectura, ahora que a nadie sorporenden los disenhos raros o descoyuntados, es la "piel" de los edificios. Sanaa son maestros a la hora de encontrar texturas nuevas (la del proyecto que colgais es muy parecida, sino identica, al revestimiento del New Museum en NY), y Herzog & de Meuron lo mismo. Hace poco he visto fotos de las obras de la sala de la Filarmonica del Elba en hamburgo y estan utilizando un vidrio hinchado y como en "degrade" que de entrada no me gusto pero que seguro que terminado quedara impresionante. Las formas, al fin y al cabo, son necesariamente limitadas, el revestimiento es lo que puede marcar la diferencia entre proyectos.
ResponderEliminarArdilla, igual que ocurrio en su momento con el hormigon, el desarrollo de nuevas tecnologias ( tanto a la hora de costruir como de diseñar) y de nuevos materiales han posibilitado un nuevo avance en el mundo de la arquitectura, ahí estan Ghery y Zaha Adid como muestras mas rebuscadas y SANAA o H&dM con propuestas mas sobrias pero igual de sugerentes.
ResponderEliminarHay arquitectos que se caracterizan por la piel de sus edificios y ahí estan sobre todo Herzog & de Meuron (a destacar la fachada para La Dominus Winery de Napa Valley, California, SANAA tambien se estn caracterizando por sus interesantes formas de entender la piel del edificio y efectivamente la malla de las fotografias efectivamente es la misma que las del New Nuseun NY.