El tema surgió a raíz de un párrafo que leímos recientemente y de las últimas experiencias que hemos tenido en un reciente trabajo. El texto que leimos es el siguiente:
Roba de cualquier sitio que te inspire o que alimente tu imaginación. Devora películas antiguas y modernas, música, libros, cuadros, fotografías, poemas, sueños, conversaciones aleatorias, arquitectura, puentes, señales de la calle, árboles, nubes, cuerpos de agua, luces y sombras. Roba sólo cosas que le hablen directamente a tu alma. Si haces eso, tu trabajo (y tus robos) serán auténticos. La autenticidad es muy valiosa, la originalidad no existe. Y no te molestes en disimular tus robos —si te apetece, celébralos. En cualquier caso, recuerda siempre lo que dijo Jean-Luc Godard: “Lo importante no es de dónde sacas las cosas — es a dónde las llevas”.
Dicen que Elvis Presley ocultó a su público que no hacía más que copiar a los bluesmen negros y desconocidos de los años treinta, que John Galliano, estilista de Dior, escondió hace unos meses que en sus campañas copiaba un concepto de William Klein. La lista de genios del siglo XX que, para brillar mejor, no revelan sus fuentes de inspiración seria muy larga pero si hay uno que lo hizo descaradamente y se atrevió a decirlo ese fue Picasso, quien copiaba a los maestros descaradamente para desafiarlos abiertamente, el artista subversivo que todo lo devoraba para mejor recrearlo.
Lo cierto es que los procesos creativos son distintos según las personas.
Hay ocasiones en que las ideas fluyen con naturalidad, pero otras nos encontramos bloqueados y cuanto mas lo pensamos y mas vueltas le damos más nos bloqueamos. Mientras más tiempo le dedica uno a decir "no se me ocurre nada, estoy bloqueado, no me siento creativo"... más pasa. Ante esto recurrimos a algo que nos libere y nos inspire y para ello solemos utiliza dos métodos completamente distintos.
Uno de ellos consiste en huir de todo, despejar nuestra mente y distraernos con algo diferente esperando que con la mente limpia se nos "encienda la bombilla", convencidos de que en el momento más inesperado la solución aparecerá, confiando en que, en algún momento y cuando menos lo pensemos y con lo que menos nos imaginemos ... algo se nos va a "ocurrir".Y así sucede a veces.
Como bien dicen "hay que salirse del problema y verlo con distancia crítica para encontrar la solución".
O bien, el otro método consiste en hacer justamente lo contrario, en vez de huir y distraernos recurrimos a libros, imágenes, obras premiadas o señaladas de otros autores o artistas que nos inspiren, que nos hagan ver por donde puede ir el camino, bien por transformación - como Picasso - , o en el peor de los casos por similitud.
Lo difícil de este segundo método es llegar a una solución inteligente y novedosa, y la mayoría de los casos se acaban copiando las ideas y adaptándolas.
Hace unos días, en uno de los blogs que solemos leer, una artista contaba como ella recurría a ese primer método, y una de sus vías de escape y distracción eran los supermercados, y justo allí, en uno de ellos, viendo todos los yogures idénticamente colocados, excepto uno de ellos que estaba dado la vuelta, le vino la vino la inspiración. Siempre que hay algo "que no encaja" llama mucho más nuestra atención que el resto de las situaciones, productos o cosas. Para bien, o para mal, la llama.
Pero, ¿que ocurre cuando es el propio cliente el que te pide una copia?, el típico cliente pesado que quiere “algo igual, igual a lo de ...”, pues hala, te lo hago igual!, o parecido como contábamos en una de nuestras entradas anteriores, en ese caso en particular era “algo rollito tipo Zara”
Recientemente una colega y amiga se ha encontrado con el desengaño de que después de que un cliente fuera a buscarla para que les realizara el proyecto del stand de feria de su empresa (una feria totalmente para profesionales de esas en que la originalidad brilla por su ausencia) precisamente para que les realizara algo distinto y original, más escenografico como suelen ser los que ella realiza; el día antes de la inauguración, cuando ya estaba todo hecho, tal y como se había reflejado en el proyecto que habia presentado y aprobado, el director general de la empresa pidió que le pusieran mas luz y le añadieran algunos logotipos en vinilo “porque no destacaba, no se veía tanto como los demás “, cuando precisamente el concepto del proyecto habia sido ese, conseguir un espacio mas intimo, con menos luz y con logos proyectados, que destacara por si mismo y atrajera al visitante por su diferencia, que invitase a entrar por su misterio, no otro “flashazo” mas de luz con grandes logos que dijera ¡aquí estoy yo!.
A nosotros nos ha ocurrido algo parecido con nuestro ultimo proyecto; lo que en un principio iba a ser un cambio total de la imagen y concepto de una empresa y su establecimiento, al final por miedo a diferenciarse demasiado han optado por que sea una evolución de su imagen actual, -algo conservadora-, sin arriesgar demasiado para ir sobre seguro.
Todos nos inspiramos en mayor o menor medida en ciertos trabajos que vemos, en una imagen, en algo que nos llama la atención, etc. Pero no eso no lo mismo que trabajar con un libro de diseño abierto delante, como si se estuviera copiando al dictado o no se tuvieran recursos mentales creativos suficientes como para recordar todas aquellas cosas que pueden servir de inspiración. Así salen luego montones de diseños iguales, no "inspirados ", sino iguales.
¿Donde queda la originalidad? ¿O es que la presión del día a día no nos permite ser capaces de crear desde cero sin tener que recurrir a los santos "libros de inspiración" que tan bien se venden en la FNAC?
Las imagenes que ilustran esta entrada corresponden a la tienda V2K Designer en Estambul
Todo está inventado. Solo interesa la forma en que se vuelve a usar.
ResponderEliminarParece que este tema se ha puesto de moda, he leido sobre esto en varios blogs ultimamente. Es cierto que la inspiración está en todas partes, pero lo que está claro es que dos personas que se inspiren en una misma cosa nunca darán el mismo resultado. La creación está en nuestra cabeza y en nuestra manera de interpretar las cosas. También es cierto que con tanta cabeza creativa es muy fácil que por caminos distintos las cosas se parezcan pero eso no quiere decir que estemos copiando. La gente que no se dedica a esto no sabe el valor que tienen las ideas, ni el trabajo que lleva llegar a ellas.
ResponderEliminarStultifer, quiza este todo inventado y no haya nada nuevo bajo el sol, pero hay infinitas maneras de combinar todas esas cosas que a su vez dan infinitos resultados. nosotros personalmente no creemos que este todo inventado,
ResponderEliminarSuperkitina, en primer lugar gracias por comentar y bienvenida.
Como decimos cada cual sigue su propio proceso creativo y los resultados seran siempre distintos como distintos somos cada uno de los seres humanos auqnue como tambien es cierto que entre nosotros a veces nos parecemos, tambien nuestras ideas pueden llegar a parecerse si parten de la misma base. pero tambien es cierto que en muchos casos se parte de una base y no se realiza mucho recorrido, simplemente algun pequeño cambio para que no se pueda decir que es una copia y nada mas, y en algunos casos ni eso, se copia directamente.
Y que razon tienes con que la gente que no se dedica a esto, no da valor a las ideas, y sin ideas no hay nada.
Saludos
Yo creo que es difícil ser original al 100%, pero creo que saber reactualizar y mezclar sabiamente con ideas propias, es también una buena forma de ser original.
ResponderEliminarBuen fin de semana,
UNo de mis temas favoritos, pero no tengo tiempo de enrollarme, lo siento. Es casi imposible ser original porque aunque no todo esté inventado tenemos tendencia a pensar que lo está.
ResponderEliminarEl siglo XX codificó en cierta medida el pensamiento postmoderno, cuya base es el reciclado de ideas anteriores, pero muchos creadores "modernos" era maestros a la hora de utilizar ideas ajenas y, por qué no, mejorarlas. Vienen a la cabeza Picasso (cuya etapa más interesante y original, en mi opinión, es la más clásica o volumétrica del período de entreguerras, también vivible en todos sus dibujos), Stravinsky o Jean Cocteau. Originalidad, la justa. Maestría a la hora de utilizar hallazgos de otros, toda.
Lo del "rollito tipo Zara" es un poco tremendo. Ya puestos, "rollito tipo Hermés", ¿no?
Perdón por prodigarme poco últimamente y buen fin de semana!!
mcarmen, si es muy dificil ser original hoy dia, y lo de copiar e inspirarse se ha hecho siempre a lo largo de la historia, como decimos en la entrada y Ardilla en su comentario muchos grandes maestros lo han hecho, de hecho la manera de empezar a aprender algo ( pintura p. ej. ) es copiando a los maestros para luego ir evolucionando cada uno a su propio estilo.
ResponderEliminarAhi esta el quid de la frase que ponemos en la entrada, copiar y absorber para asimilarlo y hacerlo propio, autentico.Como dicen en otro comentario aunque dos personas se inspiren en una misma cosa nunca darán el mismo resultado, otra cosa seria si en vez de inspirase lo que se hiciera fuera copiar exactamente, entoces si, obligatoriamente tendrian que ser la misma cosa y a su vez iguales al original, sino ya no serian copias.
Un saludo.
Ardilla, no te preocupes, sabemos de tus quehaceres y entendemos tu falta de tiempo, puedes volver sobre el tema cuando quieras.
Nosotros tampoco hemos dispuesto de demasiado tiempo en estas semanas.
Saludos
El problema es tener como objetivo la originalidad. Creo que la originalidad bien entendida tiene que ser honrada, debe ser una consecuencia de tu trabajo, tiene que ver con tu forma de proyectar, con tu forma de interpretar el mundo.
ResponderEliminar... Pero también tiene algo de osadía, por tanto entraña riesgos impredecibles...
Navegar por vías alternativas es toda una aventura, en ocasiones dolorosa, pero tan fascinante!!!
A veces se es original y otras veces no tanto, pero esto no tiene que preocuparnos, hay que hacer y hacerlo bien, lo mejor que sepamos.
La originalidad no se busca, en todo caso se encuentra...
Para terminar, hay una frase que ilustra el cuarto de baño de mi estudio, es de Gaudí y dice algo así:"La originalidad consiste en volver al origen, así pues original es aquello que vuelve a la simplicidad de las primeras soluciones".
¡Enhorabuena por el blog! Es fantástico, de verdad. Tenéis un gusto esquisito a la hora de seleccionar los proyectos. Gracias también por vuestra constancia!!!
Anonimo, o quiza mejor C. B. de Valencia, que ya hemos descubierto quien eres... ;-), bienvenida!.
ResponderEliminarComo dice la entrada y la frase que le ha dado pie, se trata no de copiar, sino de absorber, hacer tuyos elementos que te sirvan de inspiracion y luego hacerlos propios, arriesgarse, (como tu muy bien dices), por otros caminos, otros terrenos, cada uno los suyos, cada uno segun su forma de proyectar, de interpretar el mundo y de unan forma honrada y trabajando bien llegar a lo que uno llegue, que se valorará luego mas o menos, mejor o peor, pero siempre sera original, pues como deciamos antes y nos decian en otro comentario, partiendo de una misma base o un mismo elemento inspirador cada cual llegara a un termino diferente, pues diferentes somos cada ser humano unos de otros.
Y en cuanto a la frase de Gaudí, que recordamos perfectamente en ese aseo de tu estudio con espejo apoyado en el suelo "aun" sin colgar, nos parece cierto que para ser original nada mejor que volver a los origenes de las cosas, a lo primigenio, al para que es una cosa, para que va a servir, como va a funcionar... etc. mejor que ese otro metodo de coger las cosa e ir enrevesandolas y retorciendolas cada vez mas en busca de esa originalidad que al final resulta mas "extravagancia".
Bueno, lo dicho, gracias por tu comentario y bienvenida, esperamos que no sea el único, sino el primero de muchos. Nos encantará dialogar, discutir y compartir puntos de vista contigo por aqui.
Un fuerte beso.