Si se esta un poco atento al mundo de la moda, vemos una tendencia que esta despuntando, y que parece que tiene recorrido como es el Retrofuturismo, lo hemos visto en las ultimas colecciones de Vuitton y Prada y creemos que no tardara en llegar de una manera u otra al resto de ámbitos del diseño incluido el interiorismo, Es mas hace poco vimos un capitulo de la serie Castle: titulado "Punked” en el cual existía un club con esta estética.
El retrofuturismo es hacer un viaje al pasado, al presente y al futuro, a un mundo anacrónico, alternativo, donde se juntan las maquinas de vapor con las armas de rayos láser, y los ordenadores con la estética industrial y los polisones y sobreros de copa. Hoy os hablamos de retrofuturismo, y mas concretamente de su vertiente mas conocida, el Steampunk. Pero vamos por partes...
Primero tenemos que decir que retrofuturistas son aquellas imágenes que nos muestran cómo imaginaban hace muchos años que sería el futuro y por tanto el retrofuturismo es un género estético y de ciencia-ficción que rescata esas visiones de futuro generadas en el pasado, descritas en textos, ilustraciones y otras formas de expresión, acertadas o no, que se hicieron en otras épocas y que siempre tienen un toque estético del momento en que se hicieron.
El steampunk se centra especialmente en la 2ª mitad del siglo XIX, momento en que se da aproximadamente la 2ª Revolución Industrial y todo lo que conllevó.
Nació de la mano de diversos escritores de la ciencia-ficción de los años 80s, que entonces se inscribían en el género cyberpunk, entre los que se podría citar a Tim Powers, James Blaylock, William Gibson y B. Sterling.
El steampunk representa una crítica de la sociedad queriendo cambiar un pasado y creando uno nuevo de la mano de la imaginación y creatividad, imaginándose especialmente tecnología derivada del vapor (steam en inglés) y los mecanismos como alternativa a "la alternativa" -valga la redundancia- que los sustituyó en nuestro pasado real (tecnología eléctrica y diesel). Deriva pues máquinas extraordinarias, experimentos y descubrimientos increíbles... La energía eléctrica no queda excluida, pero no es tan mayoritaria como lo fue a finales del XIX, queda más como una curiosidad científica y tecnológica, o estética.
Obviamente, se inspira fuertemente en las novelas de la primera ciencia-ficción como las de Julio Verne (no es steampunk, pero sí una gran fuente de inspiración, y su aplicación y renovación se plantea como un verdadero retrofuturismo) y H.G. Wells. También se inspira en novelas de aventuras y ciencia romántica, como por ejemplo Mundo Perdido de Sir A. C. Doyle.
El steampunk pasó rápidamente de la literatura escrita al comic (La Liga de los Hombres Extraordinarios o Steampunk), del comic al cine (Wild Wild West, y el homónimo al cómic), así como a una estética que ha inspirado a escultores, ilustradores y a diseñadores de distintos ámbitos como la moda, etc.
Teniendo en cuenta todo esto podemos ver una estética retro que iría desde el 1850 hasta el 1910 (victoriano, eduardiano, art nouveau/modernismo, y otras modas de la época), con una gran carga estética de tecnología tales como aparatos, máquinas, autómatas y partes de maquinaria, y otros elementos aventureros (especialmente las gafas de aviador, o de soldador).
Ahora bien, esta estética comenzó a gustar a mucha gente y diversos colectivos y desde el 2000 se han observado fusiones estéticas diversas. Hacia el 2007 aparecieron diversas manifestaciones digitales en las redes donde se presentó el steampunk como un manifiesto estético, o quizá algo más. Webs, blogs y foros o la revista Steampunk significaron un importante impulso para dar a conocer el steampunk más allá de un género literario o visual en el mundo.
Comenzaron a transformar, o al menos colaborar en ello, al steampunk como un fuerte movimiento estético que hoy en día parece más evolucionado que su aspecto literario original, y a evolucionarlo en un movimiento contracultural. Porque , por un lado está el romanticismo de la evocación, de lo que podría haber sido, pero las razones del movimiento son mucho más profundas.
Aparte de su base teórica, el steampunk se dibuja ideológicamente como un movimiento de crítica a la sociedad consumista y capitalista, queriendo concienciar de ello especialmente a través de la tecnología y todo tipo de objetos cotidianos. Es un rechazo ante las estéticas actuales. Estériles, frías e impersonales Así pues, quiere convertir en la tecnología no sólo en objetos de una sola utilidad que cada vez se estropèan en menos tiempo, sino que además sean piezas decorativas o incluso artísticas (de ahí las conversiones de PCs y teclados, USBs,...).
Da un valor fuerte a las creaciones artesanales por encima de las producciones industriales, a lo hecho por uno mismo (Do It Yourself/DIY), a las conversiones de las producciones industriales en personales y decorativas/artísticas y en lo vintage y de 2ª mano.
Y en el caso del interiorismo, que es nuestro campo, son espacios con estilo industrial y elementos de fantasía, como accesorios de castillos, tuberías, chimeneas e incluso engranajes.
Se caracterizan por sus paredes y el techos en colores oscuros y muebles de corte antiguo hechos en madera noble y de toque clásico, sillas elegantemente tapizadas, grandes alfombras persas muy trabajadas artesanalmente, lámparas de araña (aunque no demasiado exageradas), grandes estanterías para libros, candelabros grandes y antiguos de oro o plata, copas, jarras y vajilla de cristal adornadas y barrocas. Da gran importancia a elementos que puedan sugerir que vivimos en un mundo rodeado de máquinas, mejor si además parece que tienen alguna funcionalidad.
Los complementos ideales son relojes antiguos y muy elaborados con correas de cuero y varias esferas de color sepia. Incluso también se puede concebir la existencia de ordenadores; pero estos tendrían una elegante pantalla de cristal con marco dorado sujeto con varillas, y un teclado similar al de las antiguas máquinas de escribir. También son muy típicas las guitarras eléctricas.
Hoy en día el Steampunk ofrece muchas visiones y es por tanto un movimiento elástico, adaptable y versátil, y hay diferentes grados, pero sin perder la esencia de lo que representa que es. Así casi podríamos decir que hay tantos aspectos en el Steampunk como personas aficionadas y como en todo, cada uno escoge lo qué más le gusta.
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Hola!! me gustaría saber de donde proceden las fotografías de tu artículo.
ResponderEliminarMuchas gracias y enhorabuena por el texto!!