Mondrian South Beach Hotel

Para todos aquellos a los que ayer les haya tocado la lotería o para aquellos que dispongan de medios y se tomen unos dias de vacaciones en estas fechas o próximamente, hoy vamos a comentar brevemente el Hotel Mondrian South Beach, diseñado por Marcel Wanders, del que ya hablamos por su intervención en Villa Moda en Barhain.

Con un diseño a medio camino entre Hayon y Philipe Stark, - se nota en sus obras la influencia de estos dos diseñadores - , el hotel es como un moderno castillo de hadas situado en el corazón de Miami Beach, en primera linea de costa. Se trata de un hotel de lujo en el que se pueden encontrar todas las comodidades necesarias y al que en estos momentos se considerado uno de los hoteles mas “cool” del mundo.

Esta compuesto por 342 estudios – apartamentos de una y dos habitaciones y áticos, en los que se combina el diseño más moderno en una atmósfera cálida y hogareña, por otra parte tampoco se pierde la funcionalidad, pues también cuenta con áreas infantiles de recreo y las zonas de descanso para adultos, tipo chill out, junto a una impresionante piscina y una barra de bar.

Más allá de los jardines, y tras la forma curvilínea del edificio principal, Wanders ordena y distribuye el espacio del hotel en una estructura semicircular en la que las habitaciones asemejarán palcos teatrales con vistas aseguradas hacia el jardín, “de forma que todos posean el mejor lugar de la casa”, tal y como asegura el diseñador, quién como mobiliario y elementos decorativos utiliza sólo piezas originales fabricadas por Droog Design.

Entre los caprichos del Mondrian South Beach Hotel se encuentra “Agua”, un completo spa, con una gran cantidadde tratamientos - muchos de ellos con extensas listas de espera.

Otro de los espacios comunes es su bar, situado junto al lobby y cuyos dominios se extienden hasta la privilegiada zona de la piscina; y por supuesto cuenta también con un restaurante a la altura de los más exquisitos paladares, aparte de una sala lounge y un completo fitness center.

Tanto los propietarios de las residencias como aquellos que se alojen en el hotel tendrán acceso a la playa del Hotel Delano y, por supuesto, a la marina privada y a la agitada vida nocturna del hotel, con espacios VIP privados previa reserva.

Pero si hay una cosa del hotel que llama especialmente la atención, es el vestíbulo interior, decorado en un estilo exuberante, con muebles de gran tamaño y motivos orgánicos, se conecta a través de una fantástica escalera elíptica con aire barroco a la entreplanta, con espacios para eventos y salas de reuniones.