Cuidar el Merchandising

Por las características de nuestra empresa, y aunque en ocasiones trabajamos para alguna gran compañía de mayor tamaño que cuentan entre sus empleados con escaparatistas o visual merchandising, por regla general la mayoría de nuestros clientes son pequeñas o medianas,  que cuentan con un numero reducido de establecimientos o incluso, como es el caso de algunos sectores especializados como los de óptica o farmacia, con un único establecimiento.



Aunque no se puede generalizar, y cada vez los empresarios, sobre todo aquellos con una idea clara de negocio, están mas concienciados, cuando acudimos a las primeras entrevistas con algunos de ellos de ellos antes de un futuro encargo e incluso cuando volvemos pasado un tiempo a alguna de las obras que hemos realizado lo que si notamos en ciertas tiendas, sean de factura reciente o mas antigua, es como se descuida una cosa tan importante como el visual merchandising, o hablando para los profanos, la colocación de la mercancía en la tienda.



Somos consientes de que en algunos de estos establecimientos no cuentan quizá con la sensibilidad necesaria para realizar ellos mismos esta labor y quizá tampoco con el presupuesto necesarios para contratar a un profesional del tema, pero como lo consideramos de gran importancia vamos a reincidir en el tema e intentar desde aquí dar algunas pautas para corregir esa desidia, ya que solo con unos pequeños cambios se puede influir positivamente en las ventas.

En ocasiones podemos encontrarnos con que el diseño de general de la tienda está correcto, pero lo equivocado de la disposición de la mercancía y el atrezzo o la ausencia de este puede hacer que no destaque y se vea poco atractiva a los ojos del público.



Un error muy habitual suele ser el de exhibir un exceso de mercancía. Para que necesitamos tener en una balda una gran cantidad de artículos iguales si como mucho vamos a vender 2 o 3 unidades del mismo al día? Resulta mucho mas atractivo exponer un menor numero de unidades, en el caso del textil bastaría con una unidad por talla, e ir reponiendo a medida que se vayan vendiendo, evitando así que la mercancía se vea “apelotonada” y sin darle ninguna importancia.



Otro factor importante a tener en cuenta es que exista algún criterio y estética en la colocación de los artículos. De no hacerlo así podemos provocar confusión al cliente y un exceso de información en algún caso, lo que da como resultado que este no encuentre lo que busca ni que haya ningún producto que le llame su atención y se pierda así la venta que el empresario busca.

Un error frecuente es la introducción a lo largo del tiempo de diversos elementos y anuncios publicitarios superponiendo unos a otros y sin ir eliminado los más antiguos. Esto da sensación de descuido y abandono y es percibido por el cliente como desidia por parte del establecimiento a la hora de mostrar las bondades de sus artículos.



También la introducción de nuevo mobiliario por la incorporación de nuevos productos y mercancías sin tener en cuenta la estética general de la tienda y el impacto que estos nuevos elementos va a provocar en el conjunto puede degradar, en vez de mejorar, el aspecto del establecimiento. En demasiadas ocasiones se recurre a la compra de algún elemento en tiendas de mobiliario de bajo coste o se instala alguno de los que regalan las propias marcas para hacerse publicidad sin preocuparse de si estos se integran bien en la instalación o no, e incluso varios muebles de diferentes marcas, que al final termina pareciendo la tienda un muestrario de muebles publicitarios de las mas diversa índole, cuando lo mas fácil seria integrar esos nuevos artículos o productos en el mobiliario existente y ayudarse con la colocación de un pequeño display en el mismo para destacar la nueva incorporación o marca.

Cuando se lo hemos comentado a algunos clientes y empresarios la respuesta mas habitual es que no sabían donde adquirirlos o a quien recurrir para que se lo realizaran, y en vez de dirigirse a profesionales del sector o a quienes le realizaran en su momento el diseño de la tienda, que normalmente les asesoraran sin ningún coste, han optado por la inmediatez y comprado lo primero que han encontrado y les sacaba del paso.



También tenemos que decir que en muchos casos lo que hemos detectado es falta de interés. En muchas tiendas parece regir la ley del mínimo esfuerzo, si el empresario o propietario no pone empeño, las personas al cargo o los empleados tampoco lo hacen y al final la instalación se va degradando hasta que ya no tiene mas remedio que la de una intervención o una completa remodelación.

Cuando en algunos de estos casos ves al personal o propietarios de los establecimientos de brazos cruzados o hablando entre ellos, navegando por Internet, etc. en esos ratos muertos que se producen en momentos determinadas pensamos en por que no se aprovechan para darle una vuelta a la colocación de la tienda. Cualquier pequeño cambio puede ser percibido como positivo por el publico y contribuir a su interés por el establecimiento y lo que en el se ofrece. Y eso, no lo olvidemos, se puede traducir en una venta.

También para recordar que hacer al respecto de este tema os remitimos a una de nuestras primeras entradas, la que titulamos Introducción al Merchandising. Aunque haya pasado el tiempo creemos que aun sigue teniendo vigencia.

Como ejemplo de buen merchandising os mostramos esta tienda llamada Chocolat Square en Mechelen - Belgica