Ya hemos comentado en otras entradas el incierto futuro de las tiendas multimarca, y tenemos varios ejemplos que lo confirman; han cerrado sus puertas emblemáticas tiendas como Furest o Gonzalo Comella en Barcelona, y en Madrid pocas son las que sobreviven con éxito; junto con Ekseption, aunque ésta dirigida a un público más alternativo, quizá sea Yusty la que mejor está resistiendo, aunque haya tenido que replegarse y centrarse en sus tiendas del centro de Madrid.
Sin duda mucho tiene que ver en ello la nueva generación que ha tomado el timón de la empresa, jóvenes inquietos que saben de la importancia de las redes sociales y están atentos a todo lo que ocurre en el mundo del retail hoy en día. Una muestra de ello es la decisión de remodelar su emblemática tienda de la madrileña calle de Serrano y reconvertirla en la concept store de moda masculina más exclusiva de Madrid.
Para esta nueva imagen han recurrido al interiorista del momento, Lázaro Rosa Violán, quien ha realizado una de sus características intervenciones para ellos.
Como primera medida, y acorde con los tiempos, ha prescindido del amplísimo hall de entrada que caracterizaba las tiendas de antaño y cuya función era exhibir el mayor número de prendas posible para sustituirlo por una fachada que muestra claramente el tipo de establecimiento ante el que nos vamos a encontrar en el interior.
En el interior, como siempre tratándose de Rosa Violan, el resultado es un espacio elegante e impactante, quizá demasiado en nuestra opinión, pues a veces parece dejar en un segundo plano a las prendas y los artículos a la venta, y no debemos olvidar que aunque la idea sea que el cliente se sienta cómodo y en un ambiente “especial” el objetivo principal de un establecimiento comercial es la venta de su producto.
Aunque el concepto en si está muy bien si lo comparamos con un entorno similar, como pudieran ser las tiendas de Ralph Laurent, bajo nuestro punto de vista, el género no está aquí tan ponderado como en aquellas, le falta protagonismo.
En otros detalles si se ha corregido esa desviación y se ha optado por decisiones más comerciales pues como puede verse en los renders de la propuesta inicial, la puerta de entrada iba a ser de una hoja en madera y con jardineras de plantas a los lados, un detalle muy estético pero poco comercial, pues si ya es difícil hacerle a un cliente atravesar la puerta de un establecimiento con este tipo de soluciones tan cerradas se dificulta aún más, al final se ha elegido una entrada más al amplia y más acristalada para poder tenerla siempre que se pueda abierta.
Dentro se han creado diferentes ambientes cálidos y acogedores que evocan el confort de una casa (chimeneas, sofás, estanterías con libros...). Una solución muy acertada pues quizá el mayor reto de este tipo de tiendas en el centro de las ciudades sea que se ubican que espacios extraños e irregulares y adaptar la geometría del local al proyecto no es una tarea fácil.
Prueba de ello y de los problemas que suelen surgir es este tipo de obras, es que no se han cumplido los plazos, su inauguración estaba prevista para el mes de septiembre y ha abierto a finales de octubre, solamente la planta de calle pues sabemos que la planta sótano continua en obras. Esto y el desvío en el presupuesto inicial se ha convertido en un hándicap para la empresa.
El corazón del local sigue siendo su mítica sastrería, donde se mantendrán los procesos artesanales y los máximos estándares de calidad que han dado fama a la firma, pero además incorporan nuevas marcas y diseñadores tan exclusivos de la moda masculina como Lanvin, Maison Martin Margiela o Neil Barret.
También se pueden encontrar ahora otros productos como un espacio dedicado a óptica, con marcas tan especiales como Moscot y Mykita, además de una zona de perfumería y cosmética donde encontrar joyas como Amouge, Atelier Flou, Heeley y Byredo.
Creemos en la arriesgada apuesta y el nuevo rumbo que ha tomado la tienda, que según leemos tiene casi 100 años de historia, es que ha pasado de ser una tienda de ropa a ser más una tienda de estilo de vida (lifestyle con remimiscencias clásicas y dirigido al hombre principalmente que hasta ahora ha sido más perezoso a la hora de comprar y prefiere ir a un único establecimiento a elegir la mayoría de su guardarropa sin tener que ir tienda por tienda). Yusty se convierte así en uno de los nuevos templos de la moda masculina al que le deseamos la mejor suerte, porque creemos la merecen.
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